jueves, 22 de enero de 2015

Miedo para abrazarte



Una vez tuviste miedo y te abracé

eso no me hizo más fuerte
una sensación me abdujo
como fuerza extraterrestre a otro lugar
a una casa de maderas que nunca visité
cerca, el sonido fuerte de un río  
pasar sobre las rocas
en un poema que nunca escribí
pero ya no estoy ahí con vos
tampoco se si lo viví
el planeta que recorre tu rostro
no es el mismo en el que vivo
ya no comprendo
tu sensibilidad con este mundo
¿cómo se devuelve entonces
el lenguaje de una mirada que se ignora
como una sonda  
librada al azar del universo?
construí tu imagen
como se construye una estación espacial
olvidé cargarle tu crueldad 
tus amores pasados en cada charla 
que lindo se ve todo tu pasado
pero qué hacés con tu vida contame
¿qué hacés con tu vida?
quiero creer que sos una estrella fugaz
que pasó para dejarme algo
que voy ejercitando
esto de aprender a amar
y hago como un corredor
salgo por las noches a la costa
entreno para abrir el pecho cerrado
sentirme parte del aire
acelerando el ritmo
dejando atrás algo que sé
y que no espero
con la mirada desenfocada al infinito
de todo ese cielo que nos hace nada.








viernes, 2 de enero de 2015

Amor y fiebre en tiempos de césped sintético



Puedo estar horas sin darme cuenta de la fiebre
como un cuerpo caliente que no percibe
el desgarro en competencia
aunque algo le diga que sí, que algo se rompió.
Quiero que juguemos un partido
con nuestras bipolaridades.
Podemos ir al potrero frente a la iglesia
y que nos arbitre el cura que alentaba
el vía crucis de Maidana en el bar 
una noche antes de la colecta.
Aunque no sirvo para correr me gusta
darle con fuerza  desde una posición quieta
patear un penal, un córner
un tiro libre al ángulo izquierdo
creo que vivo así también
con la presión de esperar el silbato
persignarme o escupir
la ansiedad es quien me patea afuera.
Pero a la pelota hay que llevarla por toda la cancha
correr y más cuando ganas el partido
todavía nadie gritó
el mejor gol de tu historia.
Esa noche de fiebre soñé con un chico
que conocí hace diez años
de esas personas que te hacen preguntar
qué hubiera pasado si seguían en tu vida.
Era muy bueno y lo dejé ir
los cracks siempre se van a un lugar mejor.
Al otro día me desperté y lo busqué en facebook
pero no me acepta
y no me importa lo que pueda pasar
es tarde para bajar la fiebre
para transpirar la camiseta
aunque se te rompan los ligamentos
aunque quieras volver a jugar ese partido
no confundas amor con caridad.